En CES 2019, Panasonic presenta diversas innovaciones – todas pensadas en los seres humanos como eje central y, su bienestar como principal motivación – bajo el umbral Human Insight Technologies, es decir, tecnologías que evalúan el estado físico y emocional de las personas para crear ambientes placenteros que sean confortables, relajantes y seguros. En esta ocasión, la compañía japonesa muestra tres atractivos desarrollos en los que combina Inteligencia Artificial y un poderoso software de procesamiento de imagen.
Por ahora, en un estatus de concepto, estos tres sistemas pudieran – en un futuro cercano – integrarse a otras soluciones o plataformas existentes, ya sea en el hogar, la oficina, laboratorios de investigación, espacios públicos o vehículos, para transformar la manera en que los usuarios interactúan con el entorno, y viceversa.
Se trata de tecnología no-invasiva que puede determinar, con gran exactitud, el estado emocional de un individuo al analizar distintos parámetros físicos y biométricos con el fin de mejorar su concentración en el trabajo u hogar. El sistema conceptual de Panasonic se compone de cuatro sensores que trabajan en conjunto para obtener un resultado tangible y de fácil interpretación.
Cómodamente sentado frente al módulo de sensores emocionales, el rostro del sujeto es captado por una videocámara que analiza su expresión facial y nivel de concentración. Posteriormente, una cámara térmica mide los niveles de emisión de calor, al tiempo que un sensor de presión detecta pequeños movimientos corporales; otro más se encarga de captar aromas asociados a los nervios y el estrés. El monitoreo de estos valores finalmente determina el estatus emocional de la persona y, con esa información, el sistema realiza sugerencias para mejorarlo a través de pequeños cambios en el entorno como el nivel de la iluminación, temperatura del aire acondicionado u horarios de trabajo y pausas para el descanso.
Distinto al emocional, el estrés físico es provocado por factores directamente relacionados con el cuerpo humano y algún malestar que pudiera presentarse, como un dolor de espalda o dificultad al caminar. Mediante el uso de una sencilla prueba de esfuerzo analizada por Cinemática Inversa – técnica empleada en robótica para determinar el movimiento de una articulación robótica – el sensor calcula el nivel de estrés físico sufrido en distintas partes del cuerpo a partir de la información recabada por un algoritmo vinculado con tecnología de analíticos y Big Data.
Los resultados de la prueba permiten determinar cambios o mejoras en los movimientos del individuo para evitar lesiones, reducir la fatiga o lograr un mejor desempeño físico. Esta tecnología será muy útil en las industrias que requieren trabajo físico, en laboratorios deportivos y para los desarrolladores de exoesqueletos o trajes mecánicos.